Las Salamandras, son criaturas que habitan en nuestro mundo hoy e día, pero que en su tiempo (o incluso ahora) son consideradas criaturas misteriosas y fantásticas. Son representados como elementales o espíritus del fuego, por lo que se les asocia mucho con este elemento. Se creía que se podía alimentar de este mismo.
Su apariencia puede ser la misma que la de una salamandra normal, solo que de mayor tamaño y más acercado a un dragón. Pueden caminar y vivir entre las llamas sin recibir ningún daño, pues su piel y la temperatura de su sangre les permite mantenerse en equilibrio. Normalmente habitaban en lugares de altas temperaturas, como los volcanes; pero se les podía hallar en cualquier parte con facilidad. Solo hace falta encender una fogata para llamar su atención y hacer que salgan de sus escondites.
Eran muy veneradas en la antigua Europa, y se les puede ver en lienzos, pinturas y escudos. Podías ser tomados como entes de la esencia purificadora, la ascensión espiritual y la indestructibilidad.
En algunas leyendas se creía que ver una salamandra podía representar algún hecho profético que se va a cumplir, y que incluso se podía hacer ropa basadas en su piel, las cuales en lugar de lavarse en agua tenía que meterse al horno para que quedaran como nuevas.
Si alguien intenta atrapar alguna, puede ser gravemente intoxicado por esta, ya que se creía que tenía pigmentos venenosos.
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